AH-1
Formulado para disminuir costos y efluentes, al mismo tiempo que se aumenta la productividad del baño de anodizado, este aditivo ha presentado un balance económico favorable en todos los casos donde se ha usado y evaluado.
La linea adopta una flexibilidad mucho mayor, al poder anodizar en caso de ser necesario, a temperaturas de hasta 28 °C, sin afectar la calidad de la capa anódica.
Por otra parte, al ser más tolerante a la concentración por aluminio (baja mucho menos el voltaje aplicado al aumentar el contenido de Al, para una densidad de corriente y temperatura fijos), se otorga más flexibilidad a la planta.
Este aumento en la flexibilidad implica mayor productividad, ya que se evitan detenciones por desperfectos en equipos de frío, o por cortes (descargas) de baños en momentos inadecuados.
Menor disolución de Al en el proceso, lo que implica: Menor efluente generado.
Menos gasto de ácido sulfúrico (menos cortes), y por consiguiente menos gastos de soda para neutralizarlo (y la mano de obra asociada). Menos perdida neta de Al en el proceso.
Menos disolución de la capa, lo que implica más dureza y la posibilidad de disminuir tiempos de anodizado (aumentando la productividad).
Posibilidad de trabajar a densidades de corriente muy bajas sin perjudicar la dureza de la capa. Esto permite cargar más el baño, aumentando su productividad.
Desciende el voltaje aplicado, para una misma densidad de corriente, lo que ocasiona un descenso importante en el consumo de energía eléctrica del proceso.
Los equipos de enfriamiento bajan el consumo energético al mínimo la misma cantidad que los rectificadores de anodizado.
Desciende la demanda energética global de la planta.
Se elimina el defecto de “quemado” de la capa anódica, aumentando productividad y el nivel de aprobación.
Desciende la carga sobre los equipos de enfriamiento y los costos de mantenimiento, reposición de gas, etc.
